sábado, 18 de septiembre de 2010

La izquierda no se lo cree

ALMUDENA NEGRO




Rodríguez Zapatero apoya las deportaciones de ciudadanos de etnia gitana de nacionalidad rumana y búlgara decididas por el gobierno francés de Nicolás Sarkozy y negociadas con los gobiernos rumano y búlgaro. Impensable entre los votantes, militantes y cargos del partido de quienes hasta hace bien poco, corrían otros tiempos en que el falaz Estado de Bienestar parecía boyante y la leche y miel eternos, pedían en 2005 el “papeles para todos”. España parecía entonces dispuesta a abrir sus fronteras a todos los desfavorecidos del planeta, que diría un cursi. Recuerden la alocada política de descontrol de la inmigración extracomunitaria practicada por el gobierno Zapatero bajo la batuta de Jesús Caldera, sus regularizaciones masivas, el “efecto llamada” provocado  y cómo se tildaba de xenófobo, racista y demás epítetos utilizados por la corrección para evadir las críticas de quien osaba advertir que la inmigración debía ser legal y controlada.

Ahora, cinco años después, José Luis Rodríguez Zapatero y su gobierno están, según informan los medios, preparando la deportación de ciudadanos de la Unión Europea, que es exactamente lo que son los gitanos rumanos y búlgaros, por mucha transitoria que haya, con antecedentes penales.

Una contradicción más del presidente de los bandazos. No sé de qué se sorprenden los suyos. El plan de ZP se resume en mantener el poder “como sea”.

0 Lengüetazos: